Un increible verano

Todo empezó en la penúltima semana de Junio, los exámenes terminados y un largo verano que nos llevaba esperando durante mucho tiempo detrás de muchos meses de esfuerzos, tormentos, lágrimas, sonrisas, alegrías...
Acavaba otro curso y tu y yo nos íbamos haciendo cada vez más mayores...pero juntos y no había cosa que me hiciera más feliz.Otro verano en frente nuestro pero esta vez es distinto... es nuevo.

"Quiero decirte una cosa...sé que hasta ahora no siempre he hecho todo de derechas pero al menos déjame que te de el mejor verano de tu vida. Déjame hacer de cada día un mundo nuevo, especial, único."

Y creo que así fue los días pasaban y aunque el tiempo no estaba a mi favor hice de sus ojos ver cosas que anteriormente no pudimos ver juntos, pude construir en él todo el amor por aquellos días que no podía verle.
Pero no se podía evitar lo inevitable la familia y el destino nos jugó una mala pasada y no pudimos vernos en mucho tiempo, un largo tiempo de momentos duros llenos de lamentos por la ausencia de cada uno de nosotros. Recuerdo pasar horas sentada en la orilla contemplando como las olas chocaban en la orilla y como el agua se lebantaba y deslizaba por mi cuerpo, me sentía de algún modo abrazada a ti.
Tampoco faltaron horas llorando al teléfono o horas muertas tumbada en la superficie del mar, contemplando el infinito cielo que podía estar contemplando al mismo tiempo que yo, me sentía como aquellas mañanas despertándome a su lado, con una sonrisa adormilada esperando un beso de buenos días.Me sentía a tu lado.
Fueron días de dolor, pero poco a poco pasaron y pude volver a verle, entonces pude ver renacer mis horas de alegría, por desgracia fugaces y con un beso de su boca pude volver a ser feliz.
Desde entonces todo pasó de la manera más rápida y a la vez bonita y dejaste marcado en mi corazón aquel tiempo como el mejor verano de mi vida.


Gracias...